Fueron casi tres horas sin parar. Como si fuera una mochila mágica sin fondo, la barra brasileña compuesta por unas cuarenta personas cantó a todo pulmón. Ambiente necesario para un partido bravo frente a Cuba, uno de los favoritos. Dentro de los ‘torçedores’ se encuentra Najara Izawa (41), oriunda de Cuiabá que vive el béisbol con pasión junto a su esposo, uno de los representantes de la Confederación Brasileña de Béisbol y Sóftbol, presidida por Jorge Otsuka.
Dice sentirse orgullosa de estar presente en Cerrillos “hinchando por Brasil, ellos -los jugadores en cancha- representan a nuestro país y estamos buscando la clasificación”. Najara explica que “nuestra historia en el béisbol comenzó allá en Japón. Los inmigrantes llevaron el béisbol para Brasil y en Sao Paulo hay una comunidad japonesa muy grande. Allí se formaron equipos muy fuertes, se creó el Centro de Entrenamiento de los jugadores, se formó la selección y volvió a jugar en los Juegos Olímpicos. Hoy hay una mixtura”. De los 23 beisbolistas de la plantilla, 11 son descendientes japoneses.
De los 23 beisbolistas de la plantilla brasileña, 11 son descendientes japoneses. Hoy enfrentaron a Cuba en el Centro de Béisbol y Sóftbol de Cerrillos (Foto: Santiago 2023).
Otro de los que acompaña la delegación brasileña es Alberto Yamamoto (76), hijo de japonés y residente en Curitiba, ciudad del estado de Paraná. Él ya conocía Chile por otros eventos de béisbol y turisteando en Santiago. “Creo que Chile se preparó bien con el complejo de béisbol y sóftbol aquí en Cerrillos para los Panamericanos, las canchas están muy bien, las bancas y todas las instalaciones. Los felicito”.
Sobre el sincretismo en el conjunto ‘verdeamarelo’, Yamamoto cuenta que recién “en los últimos años comenzaron a practicar no descendientes japoneses en el béisbol brasileño, entonces hoy tenemos una mezcla grande de extranjeros jugando en la selección". Por su parte, Najara menciona: “Tenemos brasileños jugando también en las categorías de base, a partir de los 7 años se entrena a los niños y así el béisbol se volvió más conocido. Muchos años atrás no lo era, hoy todo el mundo acompaña por la televisión. Mi esposo juega en nuestra ciudad en Cuiabá, allá hay varios equipos distintos”, finaliza.
La sorpresa se consuma y Brasil vence a Cuba por 4-2. La samba se bailó de inicio a fin en la cancha y en las gradas, al ir siempre por delante en el marcador. El arroz con porotos negros será más rico en un país, en el otro más amargo.
Escrito por: Vicente Vásquez Feres.
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